Paralelismos entre la comida fusión y un equipo multicultural

Como resultado de corrientes migratorias, algunos argumentan que nació en Australia y otros dicen que en Estados Unidos. Mientras tanto, hay quienes afirman que se ha originado en las zonas fronterizas. Sea cual sea el caso, la comida fusión ha ganado una gran cantidad de adeptos en el mundo. El uso de diferentes ingredientes y las mezclas innovadoras que se pueden conseguir, en ocasiones posicionan a sus platillos en otro nivel con respecto a la gastronomía tradicional.
Lo mismo sucede con los equipos multiculturales. Cada vez son más las empresas que buscan crear equipos multiculturales a propósito (ya sea trasladando a sus miembros a un solo lugar o construyendo equipos virtuales); y es que los resultados que puede alcanzar un equipo multicultural que encuentra la mezcla y armonía adecuada de los diferentes estilos propios de sus integrantes, pueden situarse también en otro nivel con respecto a los equipos tradicionales u homogéneos. Tomando el caso de éxito de la comida fusión, veamos algunos aspectos a tener en cuenta en la creación de equipos multiculturales efectivos:
La cocina fusión incorpora ingredientes o métodos culinarios de por lo menos dos diferentes estilos regionales o étnicos distintos. Un equipo multicultural efectivo incorpora personas de por lo menos dos diferentes culturas, así como las ideas que aquellas traen.
La “cocina fusión” mezcla o “fusiona” ingredientes, buscando la mejor combinación posible, manteniendo a su vez los sabores, texturas y presentaciones que los distinguen. Un equipo multicultural efectivo mezcla o fusiona sus diferentes estilos y formas de hacer las cosas, buscando la mejor combinación posible, pero permitiendo a su vez que cada persona conserve sus valores culturales y su identidad personal.
La cocina fusión es una técnica atrevida y riesgosa. Un equipo multicultural es para aquellos que quieren salir de su zona de confort y se atreven a tomar riesgos.
La cocina fusión requiere obviamente de un conocimiento profundo de varias cocinas regionales o de un equipo multi-étnico para su elaboración. La construcción de un equipo multicultural efectivo requiere un conocimiento profundo de las diferencias culturales que existen entre los miembros, para a partir de allí identificar las sinergias interculturales que pueden desarrollarse.
Es una cocina abierta a las distintas propuestas culinarias del mundo, simpatizante del exotismo gastronómico, que, sin desvalorizar la cocina local se abre sin reservas a todas las cocinas del mundo. Un equipo multicultural efectivo tiene una mentalidad global. Sus miembros, y especialmente su líder, están abiertos a escuchar y evaluar diferentes opiniones e ideas sin desvalorizarlas ni discriminar de quien vengan. Se abre sin reservas a cualquier posibilidad.
En la comida fusión, el éxito del platillo dependerá de la capacidad creadora e innovadora del Chef involucrado. Que equipo multicultural logre un desempeño promedio por encima del de un equipo homogéneo, depende en gran medida de la capacidad del líder para promover la creatividad y gestionar estratégicamente las diferencias culturales.
Los cocineros que usan la fusión en sus recetas tienen un objetivo claro: agradar al paladar del comensal y sorprenderlo. Lo importante es juntar sabores que no se perjudiquen entre sí, sino que se complementen, que sean acordes y se enriquezcan. Un líder intercultural efectivo es consciente de las ventajas competitivas que pueden generar los equipos multicultural en el negocio y facilita el contexto para un alto desempeño. También saben que las diferencias pueden ocasionar conflictos y problemas de colaboración, así que tienen presente que lo importante es crear las bases para que todos sus integrantes se sientan a gusto, se complementen y se enriquezcan.
¿Qué es lo que más te gusta de la comida fusión? ¿Podrías relacionar esto con lo lindo de trabajar en equipos multiculturales?

Shirley Saenz (ella/she)
CEO - Cross-Cultural, Diversity, Equity and Inclusion Expert
Shirley es la Directora de Iceberg y Expert Panelist de los Global, Diversity, Equity & Inclusion Benchmarks (GDEIB). Cuenta con más de 12 años de experiencia en el mundo corporativo y en 10 países de América Latina. Certificada en liderazgo inclusivo, inteligencia cultural, y benchmarks globales de DEI. Shirley tiene un profundo conocimiento de la diversidad cultural de América Latina y experiencia suficiente facilitando conversaciones estratégicas en DEI con niveles directivos y de liderazgo.